Esta semana se han presentado los resultados del estudio realizado por Dimensional Research, solicitado por la empresa Essentium. Su investigación analiza las experiencias prácticas de los actores que han invertido en la impresión 3D para la producción de piezas terminadas, más allá de los prototipos simples. Aunque las tecnologías 3D tienen un enorme potencial, la industria ha tardado bastante en adoptar tecnología para la producción en masa. El estudio de Dimensional Research, por lo tanto, recopila datos sobre los usos de la impresión 3D y también intenta comprender los desafíos actuales en la adopción masiva de las tecnologías. El informe se basa en una encuesta en línea de 114 participantes que toman decisiones de fabricación aditiva industrial en sus respectivas compañías. Para más información.
Fabricación
Crece la demanda de personas con perfil ACIT (Analíticos, creativos, innovadores y tecnólogos). Es lo que podemos concluir del artículo de Emma Charlton para el World Economic Forum en el que resalta las tendencias en habilidades laborales para el año 2022. Por orden de importancia figuran el pensamiento analítico e innovación, aprendizaje activo y estrategias de aprendizaje, creatividad, originalidad e iniciativa, diseño tecnológico más programación y pensamiento crítico más resolución de problemas complejos.
Resulta muy interesante observar que esta última habilidad, que en la actualidad es una de las más deseadas, cae al puesto sexto para el año 2022. Si hace unos años se buscaban habilidades como el trabajo en equipo o la atención al detalle, en el futuro se buscarán perfiles que mezclarán la capacidad analítica, la creatividad y la innovación con la tecnología y la programación. Las buenas noticias son que por medio del aprendizaje a lo largo de la vida nunca es tarde para entrenar estas habilidades. Un estudio publicado este mes confirma que el cerebro seguiría produciendo neuronas hasta los 90 años.
Los retornos en innovación decrecen para la mayoría de las empresas, según describen los autores Omar Abbosh, Vedrena Savic y Michael Moore en su último artículo para Harvard Business Review. Uno de los motivos es que la presión a la que se están viendo sometidas las empresas provoca que desarrollen proyectos de innovación sin una estrategia clara, desconectadas del negocio y mal gestionadas. Las pocas empresas que se sintieron muy satisfechas de sus esfuerzos en innovación hicieron algunas cosas de forma diferente al resto.
En primer lugar, las empresas exitosas apuntaron sus desafíos de innovación a retos que resolvían problemas de gran importancia. Por su parte, las empresas menos efectivas enfocaron sus inversiones de innovación a mejoras incrementales de productos y servicios existentes. En segundo lugar, las empresas innovadoras desarrollaron aproximaciones coherentes integrando sus capacidades en una arquitectura única. Por el contrario, los ejecutivos de las empresas con peores resultados describían la innovación como momentos de inspiración aislados y desconectados del núcleo del negocio. Estos resultados confirman la necesidad de trabajar la innovación junto con las competencias centrales y las capacidades dinámicas.
Los equipos estelares de las startups poseen unas claves que podemos explorar en el artículo de Eva de Mol para Harvard Business Review. En el pasado se pensaba que la experiencia era el ingrediente principal. En realidad sucede que esa experiencia por sí sola no conducirá al éxito. En cambio, el conocimiento, las habilidades y la pasión son igual de importantes para tener éxito. La experiencia solo conducirá a un mejor rendimiento si los miembros del equipo comparten sus conocimientos y tienen una visión común para la empresa.
Los equipos Agiles aceleran los productos mínimos viables (PMV) destacan los autores Santiago Comella-Dorda, Krushpreet Kaur y Ahmad Zaidi en su último artículo para McKinsey en el que hablan de los efectos positivos de la agilidad organizacional. Cada vez es más frecuente que las empresas fomenten el intra / emprendimiento para lanzar nuevos productos, servicios y modelos de negocio. Los equipos ágiles trabajan mejor las fases de la prueba de concepto (PoC) y PMV. Otro aspecto muy importante es que las organizaciones ágiles establecen Objetivos y Resultados Clave (ORC), lo que facilita priorizar mejor.
Tendencias poco obvias son aquellas que requieren en su identificación de técnicas de pensamiento creativo ya que suelen pasar desapercibidas para la mayoría de las personas. El autor Rohit Bhargava nos plantea 7 para el año 2019: El crecimiento de todo lo retro, la revisión del concepto de masculinidad, la envidia innovadora, la influencia artificial, la empatía organizacional, el renacer de los robots, contar historias y los efectos onda de la tecnología.
Fuente: INNOVADORES by Inndux – LaRazón
+Info: https://innovadores.larazon.es/es/not/la-empresa-necesita-con-urgencia-perfiles-acit
Repsol, a través de su fondo de inversión estratégico, ha adquirido un 17% de la compañía eldense Recreus, dedicada a la producción y comercialización de filamentos termoplásticos flexibles y rígidos para impresión 3D, según ha informado fuentes de la multinacional. Recreus es uno de los fabricantes más relevantes de este mercado, gracias a su reconocida marca de filamentos flexibles Filaflex. Para más información
Valencia, 25 mar (EFE).- Más de la mitad de los municipios de la Comunitat Valenciana serán considerados como zonas prioritarias de inversión industrial y podrán obtener mayor valoración para optar a las ayudas del Programa de Reindustrialización y Fortalecimiento de la Competitividad Industrial del Ministerio de Industria.
El conseller de Economía, Rafa Climent, ha informado de que el Ministerio de Industria ha aceptado la propuesta de la Conselleria para que cerca de un 52 % de los municipios de la Comunitat Valenciana estén incluidos en las zonas prioritarias de inversión.
Economía ha seleccionado como zonas prioritarias de inversión aquellas con sectores maduros que precisan una modernización e impulso competitivo, las que han sufrido un proceso de desindustrialización, las afectadas por la transición ecológica y sus consecuencias, las zonas de posible desarrollo industrial y las que sufren despoblamiento.
El Programa de Reindustrialización y Fortalecimiento de la Competitividad Industrial del Ministerio estaba dotado con 400 millones de euros en 2018.
“En la Comunitat Valenciana vamos por delante de las inquietudes planteadas por el Ministerio, puesto que ya tenemos aprobada la Ley de Gestión, Modernización y Promoción de Áreas Industriales, que precisamente establece la realización de un mapa industrial en nuestro territorio”, ha asegurado Climent. EFE
Fuente: La Vanguardia
+Info: https://www.lavanguardia.com/local/valencia/20190325/461235649212/mas-de-la-mitad-de-los-municipios-seran-zonas-prioritarias-de-inversion.html
Robots industria
Los robots, los algoritmos de inteligencia artificial, la informática en la nube, la internet de las cosas, los macrodatos y las plataformas de economía compartida son algunos ejemplos de las nuevas tecnologías que ya forman parte de nuestra vida cotidiana.
Todas estas tecnologías han transformado profundamente la actividad económica de las empresas y el trabajo, con la aparición de nuevas compañías y profesiones, con mejoras en la eficiencia o con el impulso a la transformación social. En la actualidad, casi el 40 % de la industria española utiliza robots. ¿Podríamos decir, pues, que estamos ante una cuarta revolución industrial?
Joan Torrent, profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), explica que «para poder hablar de un nuevo ciclo económico, la robótica debería estar ya presente al menos en la mitad de las empresas de la industria española». No obstante, según las previsiones de la Federación Internacional de Robótica (IFR), en el año 2020 la industria mundial utilizará más de 2,5 millones de robots, a un ritmo de crecimiento anual que superará el 10 % y con un número de unidades que duplicará los robots que había a comienzos del año 2010. Aunque en la actualidad más del 70 % de los autómatas se ubican en empresas de automoción, electricidad y electrónica, metalurgia y química, se prevé que durante los próximos años se expandan hacia otros ámbitos de la industria.
Sin embargo, ante este paradigma existe cierto miedo del impacto que estas nuevas tecnologías pueden tener en la productividad y el trabajo de las empresas. Por este motivo, los Estudios de Economía y Empresa de la UOC ponen en marcha una serie audiovisual de ocho capítulos con el título Sharing Economy para reflexionar sobre el impacto de la economía colaborativa en diferentes ámbitos, como el mercado de trabajo, el turismo o el comercio electrónico. En el primer capítulo, Torrent analiza de qué forma estos nuevos comportamientos e intercambios que se llevan a cabo entre iguales (peer-to-peer) mediante las plataformas cambiarán radicalmente la dinámica de la economía, la empresa y el trabajo a lo largo de los próximos años.
La robótica, una aliada para las empresas que innoven
Torrent asegura que los avances tecnológicos y la introducción de mejoras que facilitan el desarrollo deben ser, sin duda, aliados de las empresas. «La robótica tendrá un efecto positivo asegurado en las empresas que tengan desarrollada toda la parte relacionada con la investigación y la innovación, así como en aquellas que hayan incorporado las novedades de la primera ola tecnológica», explica Torrent en el estudio «Conocimiento, robótica y productividad en la PYME industrial catalana: evidencia empírica multidimensional».
En ese sentido, el profesor apunta que las empresas que utilizan robots «facturan más, exportan más, son más eficientes y, por lo tanto, mejoran la productividad». Sin embargo, ante este panorama aumenta la preocupación por el futuro de los puestos de trabajo. Torrent explica que «la tecnología no destruye el trabajo, sino que sesga habilidades y destrezas, y desplaza tareas, trabajos, empleos y personas». No obstante, el profesor reconoce que «a medida que crece la utilización de la robótica, el número de trabajadores disminuye más rápidamente que el número de empresas que no la utilizan».
Un informe de la Universidad de Oxford apunta que el 36 % de los puestos de trabajo españoles están en riesgo de digitalización. «Estamos observando que la robótica y la inteligencia artificial desplazan los trabajos de tramos y cualificaciones medios, mientras que las personas que realizan trabajos de la franja baja o alta no tendrán tantos problemas para coexistir con ella», razona Torrent. Sin embargo, el profesor explica que «este tipo de tecnologías acaban dando lugar a nuevos perfiles profesionales, aumentan los salarios de la gente y crean nuevos puestos de trabajo, que suelen compensar, en general, los que se pierden con la gente que queda desplazada».
La inteligencia artificial y los robots, muy presentes en la economía de plataformas
Hoy día, gracias a los nuevos medios y a las redes sociales, la gente tiene la posibilidad de colgar todo tipo de contenidos en internet y esto ha dado lugar al establecimiento de plataformas de comunicación entre individuos que hacen que la gente pueda intercambiar bienes y servicios de todo tipo. De hecho, según el Flash Eurobarometer 467, el 23 % de los europeos ya han utilizado servicios mediante las plataformas de economía colaborativa, la mayoría en los sectores del turismo y del transporte.
Torrent apunta que las tecnologías de la segunda ola digital tienden a la convergencia mediante relaciones de complementariedad. «Cada vez es más habitual que las plataformas de movilidad utilicen mecanismos de geolocalización (Google Maps) y chatbots (algoritmo de inteligencia artificial) para saber las necesidades de los usuarios», ejemplifica el profesor.
Esta relación, añade, también se produce al revés, ya que, por ejemplo, «la robótica social (como el humanoide Pepper) utiliza la información que las personas suministran a las redes sociales o profesionales para conocer su estado de ánimo a partir del reconocimiento de rasgos del carácter mediante la expresión del rostro».
Fuente: CEPYMENEWS
AsiaInspection, rebautizada en diciembre como QIMA, lanza su análisis sobre el abastecimiento global en 2018: guerras comerciales, diversificación, desafíos de sostenibilidad, etc.
Exponemos a continuación los resultados del barómetro del primer trimestre de 2019 de QIMA; proveedor global líder de servicios de cumplimiento y control de calidad, anteriormente llamado AsiaInspection.
El 2018 fue un año difícil para el abastecimiento global. Esta complicación fue debida, sobre todo, a dos factores principales:
- El estancamiento arancelario entre los Estados Unidos y China.
- El creciente control de los consumidores y los gobiernos en materia de sostenibilidad.

Fruto de estas dos realidades, muchas marcas y minoristas optaron por una mayor diversificación de su abastecimiento. De esta forma podían protegerse contra los riesgos arancelarios y las políticas proteccionistas. Mientras tanto, las firmas luchaban también para intentar mantener una mejora lenta pero constante en la ética de la cadena de suministro.
En este barómetro, QIMA analiza los datos recopilados durante cientos de miles de inspecciones in situ, auditorías y pruebas de laboratorio realizadas durante 2018.
Asia como proveedor
La resiliencia que mostró China en 2018 no pudo ocultar la diversificación que se está produciendo.
A pesar de una leve desaceleración a finales de 2018 como consecuencia del arancel entre China y los Estados Unidos, la demanda de inspecciones y auditorías de China se mostró firme durante todo el año. De hecho, presentó un crecimiento del 8,5% en comparación con 2017.
Una encuesta elaborada por QIMA en 2018 a más de un centenar de empresas de todo el mundo demostró que el 30% de los encuestados estaba desviando su abastecimiento de China a otras regiones. Además, hasta tres cuartas partes señalaron que ya habían comenzado a buscar proveedores en nuevos países, o que lo harían antes de que acabase el año. Estas cifras demuestran que la diversificación geográfica del abastecimiento está en marcha.
De hecho, QIMA registró un crecimiento significativo de las actividades de control de calidad en diferentes partes de Asia.
- En el sudeste asiático, Indonesia y Camboya aumentaron la demanda de inspecciones y auditorías en más del 50% en 2018.
- La demanda de inspecciones y auditorías en el sur de Asia creció dos dígitos, superando el pronóstico del crecimiento económico de la región.
- Bangladesh, un destino siempre popular para textiles y prendas de vestir, vio una afluencia particularmente fuerte de compradores. Este interés dio como resultado un crecimiento del 37,3%.
Ética en la cadena de suministro
La apuesta por nuevas regiones de abastecimiento conlleva un riesgo para el cumplimiento de los parámetros de sostenibilidad.
Las visitas de los auditores de QIMA a las fábricas han dejado resultados positivos. Han demostrado que el pasado 2018 las marcas y los fabricantes fueron un 4,4% más éticos que en 2017.
Sin embargo, esta tendencia positiva generalizada está sesgada por los buenos resultados en China. Y es que, dicho país tiene una red de fabricación más madura que aplica mejoras constantes en materia de ética. En cambio, si nos fijamos en otras regiones como Vietnam, Indonesia y Turquía, vemos como el trato hacia sus trabajadores empeoraba un -5,1%, un -3,2% y un -3,1% respectivamente.
De hecho, el 24% de las fábricas analizadas todavía cometía violaciones éticas críticas en 2018. Además, esta situación se agrava todavía más si tenemos en cuenta que Vietnam, Indonesia y Turquía son, precisamente, los que captan cada vez más la atención de los compradores que desean diversificar sus fuentes de aprovisionamiento.
“Afortunadamente”, si analizamos los datos de auditorías realizadas por QIMA en 2016 podemos apreciar un avance lento pero constante en materia de ética en el sector textil/confección. Esta tendencia, junto al hecho de que esta industria haya recibido un gran control por parte de los consumidores, demuestra que las mayores demandas de transparencia en la cadena de suministro dan como resultado mejoras en la ética a medio y largo plazo.
Principales problemas éticos
Durante 2018, los problemas éticos más apremiantes en la cadena de suministro afectaron a:
- la gestión de residuos
- las horas de trabajo
- los salarios
Las empresas que se abastecen de China deben tener en cuenta los próximos cambios en las regulaciones de seguridad social del país. Una recomendación de QIMA es que fortalezcan sus controles de auditoría en el área de registros de nómina y prácticas de empleo de sus proveedores.
Seguridad en las fábricas
En términos de seguridad en las fábricas, más del 60% requieren mejoras. A pesar de todo, este aspecto también varía mucho según la región. Así, en el sudeste asiático algo más de la mitad de todas las fábricas necesitaban mejoras a corto y medio plazo. Mientras en China, desafortunadamente, este porcentaje se eleva hasta alcanzar casi el 70%.
La competencia repercute en la calidad
2018 ha sido un año difícil en lo que a calidad del producto se refiere. Los textiles y las prendas de vestir han perdido calidad al intentar ajustar los costes y precios
2018 ha sido un año difícil en lo que a calidad del producto se refiere. Los textiles y las prendas de vestir han perdido calidad al intentar ajustar los costes y precios
El impacto de la diversificación del abastecimiento en 2018 también se reflejó en las cifras de calidad de los productos. Los fabricantes chinos, al verse presionados a reducir los costes para seguir siendo competitivos, han visto afectada la calidad de su producción. De hecho, más del 25% de los productos inspeccionados presentaron un deterioro del 16% en comparación con el año anterior. En regiones más conflictivas como Camboya o Turquía, estas tasas aumentaron en casi un 30%.
Sin embargo, centrándonos en la industria textil, los datos de inspección de QIMA muestran que los fabricantes lograron algunas mejoras en la calidad del producto. Lo hicieron reduciendo las tasas de inspecciones negativas en un 18.5% en 2018. Esta mejora es un posible reflejo de la evolución gradual que ha vivido la ética de la cadena de suministro en los últimos dos años.
En este sentido, los datos de QIMA muestran una correlación positiva entre la ética y la calidad. Esta coincidencia se refleja a través de factores como las mejores condiciones de trabajo y la captación de personal calificado que contribuye a una mayor calidad del producto.
Químicos y sustancias nocivas
Mientras tanto, los datos de los laboratorios de QIMA muestran que la eliminación progresiva del plomo y especialmente los ftalatos sigue siendo un problema para los proveedores que venden a la Unión Europea y a los Estados Unidos.
Concretamente, en 2018 más del 7% de los productos analizados no cumplieron con las tasas europeas que establece el REACH. La mayoría de ellos contenían cantidades excesivas de plomo y el 8% incluso ftalatos prohibidos.
Los proveedores que suministran a los Estados Unidos presentaron una mejor tase en lo que al plomo se refiere: por debajo del 5%. Esto representa una mejora notable en términos de cumplimiento con los requisitos de la USP CPSIA en comparación con 2017. Sin embargo, el ftalato siguió siendo un problema: las tasas de fracaso de la prueba llegaron al 9%; un porcentaje que se mantiene estancado desde hace dos años.
Estos son los puntos más importantes del barómetro de QIMA


Fuente: Pinker Moda
La cuarta revolución industrial y los retos en economía circular y sostenibilidad han sido, según Texfor, aspectos claves para el sector.
El recién cerrado 2018 será recordado como un año de transición e incertidumbre económica para el textil. Ante esta coyuntura:
- La contracción del consumo prevista se ha situado en torno al 2%.
- El número de empresas del sector se ha mantenido en 3.600.
- La cifra de negocios ha superado los 6.100 millones. En 2017 se registraron 5.852 millones.
- El número de trabajadores ha crecido un 2%, superando los 47.000. Destaca la firma del Convenio Extraestatutario del Textil y de la Confección entre patronales y UGT, que recoge incrementos salariales del 2%.
Un sector, varias velocidades
La propia naturaleza heterogénea del textil permite hablar de distintas velocidades dentro del sector. Los textiles técnicos han presentado un mejor comportamiento en 2018 que los orientados a moda y hogar. Así pues, el sector mantiene el pulso en un año marcado por la volatilidad, las dudas sobre la marcha de la economía y los cambios en los hábitos de consumo.
Encuesta al sector
Como cada año, Texfor -Confederación de la Industria Textil- ha realizado una encuesta a los empresarios del sector textil. Los resultados reflejan un curso desigual, una gran diversidad de opiniones sobre el momento que está viviendo el sector. A partir de estos datos, se pueden establecer tres corrientes sobre la evolución de 2018:
- El 42% de los encuestados afirma que 2018 ha sido peor que el pasado año.
- El 33% asegura que ha sido igual.
- El 25% restante cree que ha sido mejor que 2017.
A pesar de esta gran diversidad de opiniones, la mayoría de empresarios coinciden en un aspecto. En su opinión, el mercado interno ha sido el que ha tenido un peor comportamiento a lo largo de 2018 seguido del conjunto de la UE. Por el contrario, los mercados de terceros países han registrado una evolución más positiva.
Ralentización del comercio exterior
El comercio exterior (clave para el sector) también ha pisado el freno en 2018. El ritmo de las exportaciones se ha moderado en comparación con los ejercicios anteriores con un incremento estimado del 1%. Las previsiones indican que:
- El volumen total de las ventas en el extranjero será de 4.500 millones de euros. El principal destino será la UE, seguida de Marruecos y Turquía.
- Las ventas destinadas a mercados extracomunitarios han registrado fuertes crecimientos. Destacan los de Corea del Sur (100%), Bangladesh (70%), Cuba (36%), China (20%) e India (11%).
- Las importaciones han caído un 3% durante 2018 como consecuencia de la desaceleración del consumo. Los principales proveedores internacionales de la industria textil española son China (23% de las compras en el exterior), Italia (11%) y Turquía (7%).
Retos y perspectivas de futuro
Texfor concluye que, a granes líneas, se puede hablar de un modelo en vías de agotamiento. Según la misma entidad, el futuro del textil pasa necesariamente por la economía circular, la sostenibilidad y la digitalización. Se trata de una reinvención irreversible del sector que implica cambios profundos a todos los niveles de la cadena de valor.
Entre los retos más inmediatos destaca el aumento en los costes de producción. Este incremento se aplicará, sobre todo, en:
- Materia energética.
- Productos químicos industriales. Debido a la nueva normativa del REACH.
- Laboral. el sector debe hacer frente a la falta de personal técnico cualificado y de ingenieros, así como al envejecimiento de las plantillas. El textil debe continuar reivindicando y fortaleciendo su papel en el conjunto de la economía como uno de los sectores más dinámicos, innovadores y punteros de nuestro país. España debe destacar su papel como potencia mundial en el sector textil, cuyas empresas son líderes y compiten al más alto nivel en el panorama internacional.
Según la mayoría de empresarios encuestados por Texfor, las perspectivas para 2019 mejoran con respecto a la realidad de 2018. Así lo reflejan los principales indicadores en la recta final de 2018, con avances en el ritmo de creación de nuevas empresas, en la cifra de negocios, en el número de trabajadores y en los precios industriales.
Fuente: Pinkermoda
La industria de la moda sigue sin recuperar su plantilla precrisis. Desde que comenzó la recesión en 2008, el sector ha destruido casi 34.000 puestos de trabajo, un 19,2% de su fuerza laboral. Los avances registrados en 2014 y 2015, los primeros de la recuperación, han perdido impulso, hasta situarse en sólo el 0,2% el año pasado. Sin embargo, la evolución ha sido desigual sector a sector. El calzado es el único que ha logrado salvar los muebles y volver a niveles de 2008, mientras que el textil y la confección se han dejado a casi 40.000 trabajadores por el camino.
El calzado cerró 2018 con 45.231 afiliados a la Seguridad Social, un 0,3% menos que el año anterior. El sector encadena tres años con tímidas reducciones de empleo, pero su aguante en años duros como 2010, 2012 o 2013 ha permitido al sector sumar 7.215 trabajadores en la última década, un 19% más.
Esta industria fue ya la menos afectada por la crisis: aunque en 2008 y 2009 la caída de su fuerza laboral estuvo en línea con la del textil y la confección, pronto recuperó el empuje y logró salvar cada año hasta 2015 con crecimientos, salvo un moderado traspié en 2012.
En cambio, la evolución del textil y la confección ha sido la opuesta. Esta última, que se mantiene como el primer empleador en el sector, ha pasado de sumar 70.127 trabajadores en 2008 a emplear a 49.102 personas diez años después. El saldo deja 21.025 empleados menos, lo que lo sitúa como el subsector que más empleo ha destruido en la última década.
Su golpe, sin embargo, llegó ya antes de la crisis, cuando el fin del Acuerdo Multifibras y la entrada de China en la Organización Mundial del Comercio (OMC) trasladaron gran parte de la producción a Asia. Entre 2005 y 2008, el sector perdió más de 21.000 trabajadores.
La crisis fue una nueva embestida para el empleo en la confección, que llegó a encoger hasta un 13,5% su plantilla en 2008. A partir de 2014, el sector volvió a crear empleo, aunque con subidas moderadas, pero el año pasado puso fin a una racha de cuatro años al alza con una caída del 0,9%, la primera desde la crisis.
El textil, por su parte, es el que más empleo ha recuperado desde el fin de la recesión, sumando 5.871 nuevos empleos (frente a los sólo 1.569 que incorporó la confección y los 5.096 del calzado).
Es también la única industria de la moda que continuó aumentando su plantilla en 2018, con un alza del 1,9%, hasta 47.207 afiliados. Con todo, sus niveles siguen muy lejos de los de antes de la crisis.
En la última década, el textil ha destruido 19.845 puestos de trabajo, tras registrar caída de hasta el 30% en 2009. De hecho, fue el sector que más empleo destruyó entre 2007 y 2013, el último de la crisis, eliminando 35.968 empleos, frente a los 33.562 que perdió la confección y los apenas 3.911 que se destruyeron en el calzado.
¿El motivo? El calzado ha logrado encontrar su hueco tras el traslado de la producción a países asiáticos y con menores costes productivos, con hubs como Elche (Alicante) como punta de lanza.
El comercio exterior ha sido crucial para que la industria española del calzado aguantara el envite de la recesión. De hecho, es el único sector de la moda que mantiene superávit exterior. Además, pese a que en los últimos años se ha apostado por un producto de mayor valor añadido, el calzado español continúa siendo muy competitivo en precio.
En 2017, el precio medio de exportación del calzado español fue de 16,43 euros por par, por debajo de los 18,5 euros de la media europea y muy lejos de los 41,96 euros a los que se venden los zapatos italianos, los más caros de Europa.
Fuente: modaes.es
+Info: https://www.modaes.es/entorno/calzado-vs-confeccion-cara-y-cruz-del-empleo-en-moda-desde-el-inicio-de-la-crisis.html
Katowice (Polonia), 10 dic (EFE).- Grandes empresas del sector de la moda acordaron hoy durante la Cumbre del Clima (COP24) de Katowice (Polonia) sumarse a los esfuerzos contra el cambio climático, reducir progresivamente sus emisiones y contribuir al desarrollo sostenible.
“La industria de la moda siempre está dos pasos por delante cuando se trata de influir en la cultura mundial, por lo que es un logro que asuma ahora liderazgo en la lucha contra el cambio climático”, dijo la secretaria Ejecutiva de Naciones Unidas para el Cambio Climático, Patricia Espinosa.
Cerca de 45 referentes del mundo de la moda, incluidas empresas como Adidas, Burberry, Esprit, Guess, Gap, Hugo Boss, H&M, Inditex (con marcas como Zara) y Levi Strauss, suscribieron hoy un documento, la Carta del Clima de la Moda, por el cual se comprometen a respaldar las políticas climáticas impulsadas por la ONU.
Al documento también se sumó la empresa de logística global Maersk y la organización ecologista Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
“Felicito a los firmantes de esta importante carta, que representa un compromiso y una colaboración únicos, un ejemplo de que, como las pasarelas de moda marcan tendencias, también se puede marcar tendencia en acción climática para que sea un referente en todo el mundo”, añadió Espinosa.
La carta, que está abierta a que otras empresas y organizaciones se unan, reconoce el papel crucial que puede desempeñar la moda en la ecuación sobre cuestiones climáticas, así como las oportunidades para reducir las emisiones de gases invernadero que genera el sector al tiempo que contribuye al desarrollo sostenible.
Este compromiso se alinea con el Acuerdo de París de 2015, y se marca como objetivo que la industria de la moda reduzca a cero sus emisiones para 2050, a la vez que define los retos que deberán abordarse en ese periodo: desde la descarbonización de la producción, la selección de materiales sostenibles, transporte con bajas emisiones o la sensibilización de los consumidores.
Las empresas firmantes se han marcado un camino hasta 2050 que pasa por reducir sus emisiones en un 30% para 2030, y han establecido metas concretas como la generación de calor y electricidad a través de energías renovables en sus propias instalaciones y en la de sus proveedores directos a partir de 2025.
“Este compromiso trata de unir a la industria de la moda en un trabajo en favor del clima que es sumamente importante, ya que nuestro sector tiene un alcance global y solo juntos podemos crear el cambio que se necesita con urgencia”, dijo el director general del grupo H&M, Karl-Johan Persson.
Las acciones previstas en la Carta del Clima de la Moda se desarrollarán colectivamente a través de grupos de trabajo que convocará Naciones Unidas a partir de 2019.
Fuente: LA VANGUARDIA
+Info:https://www.lavanguardia.com/vida/20181210/453486859645/el-sector-de-la-moda-se-compromete-en-la-lucha-contra-el-cambio-climatico.html
La producción industrial registró un incremento interanual del 7,2 % en octubre en la Comunitat Valenciana, lo que la sitúa como la tercera comunidad con mayores aumentos y por encima de la media nacional.
En el conjunto nacional la producción industrial subió el 3,6 % en octubre en tasa anual, tras registrar un descenso del 3 % en septiembre, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El ascenso interanual de la producción en octubre fue consecuencia del incremento de todos los sectores -salvo la energía que se redujo un 0,2 %- y, especialmente, de los bienes de equipo, que aumentaron un 7,3 %.
También tiraron de la producción los bienes de consumo no duradero (que subieron un 3,9 %) y los de consumo duradero (un 3,8 %), así como los bienes intermedios (un 2,9 %).
Por actividades, las que más influyeron en el incremento interanual de octubre fueron la industria de la alimentación, la fabricación de otro material de transporte, la de maquinaria y equipo, la de productos metálicos y la de material y equipo eléctrico.
La producción industrial aumentó en todas las regiones, salvo Murcia (10,6 % menos), La Rioja (6,8 % menos), Andalucía (2,6 % menos) y Canarias (1,5 % menos).
Los mayores incrementos se registraron en Madrid (10,4 % más), Cantabria (8,8 %), Comunitat Valenciana (7,2 %) y Aragón (6,9 %).
Una vez eliminados los efectos estacionales y de calendario, la producción industrial creció un 0,8 %, frente al descenso interanual del 0,2 % experimentado el mes anterior.
Comparado con el mes anterior y en términos corregidos, la producciónindustrial creció un 1,2 % durante octubre, frente a la caída del 0,7 % deseptiembre, impulsada sobre todo por los bienes de equipo, que incrementaron suproducción el 3,3 %, seguidos por los de consumo duradero (2,2 %) y la energía(2 %). EFECOM
Fuente: La Vanguardia